11 marzo, 2008

Corazones de tiza









Se llamaba Carmen, se llamaba Lola
se llamaba Juana, nunca estaba sola
se llamaba Rosarito, se llamaba Raquel
se llamaba Carlota y jugaba a la pelota
se llamaba Sofía, se llamaba Brigitte
se llamaba Rita y se hacía la bobita
se llamaba Jenna, se llamaba Marilyn
eres tú la más bonita, pastillita y a dormir.

Con olor de violeta, con olor de jazmín
si me das una peseta entrarás en el jardín
y verás todas las flores, mariposas de colores,
estrellitas en el cielo con guirnaldas en el pelo
y vapores de seda y fulgores de carmín
y te digo mi secreto que que si en un rincón te meto
y te tapo los ojos y contamos hasta diez
estás como en el cine y empezamos otra vez.

06 marzo, 2008

Máxima adherencia




Hay personas que se le pegan a una como lapas. Son como ventosas , como esas compresas que no se notan , no traspasan, pero sobre todo no se mueven (por cierto alguien tendrá que hablar con los fabricantes y explicarles que sus niveles de adherencia no hay braguita que los resista. Mujeres del mundo en edad de menstruar, uníos!!!).

En fín, que cuando un pelmaz@ anida en tu vida no te lo sacas ni con agua caliente.
Y lo que es peor aún, el pelmazo@ contumaz no se da por aludido ante indirectas y hay que abordarlo por las bravas o mandarlo a la mierda directamente. Pero ni así.

02 marzo, 2008

Intentado volver




Uffff había escrito una parrafada super profunda, muy poco propia de mí, la verdad. Y claro, he corrido a borrarla porque aunque estoy atravesando una etapa muy muy profunda en mi vida, no quiero ponerme trascendental. Así que me he dicho, venga, Lovely, con un par!!! Jajaja, y aquí estoy, intentando retomar el blog y tratando de retomar las riendas de mi descarriada vida.

Y es difícil, eh? que muchas veces en la vida una no sabe para donde tirar. Pero en esos casos todo pa'lante y sin mirar atrás ni para coger impulso. Ese es mi lema, y así me ha ido muchas veces (de mal y de bien) jajaja, pero es mi naturaleza, qué le voy a hacer. Espero no tropezar de nuevo con la misma piedra. Y aunque hoy sea más cautelosa que ayer, no descarto estar equivocándome. Lo mío no tiene remedio: Bipolaridad total.

Hay amores